insta-mamis

Alucinada me encuentro con las "insta-mamis" que nos encontramos en la web, concretamente en IG. Adoraba ésta red social, sobre todo antes, cuando los post aparecían coronológicamente. La gente se dedicaba a sacar fotos bonitas, a enseñar sus vidas, sus viajes, sus compras, sus gatitos...

Pero como todo en la vida, va cambiando y si al principio la red estaba llena de chicas y chicos jóvenes y solteros, éstos se fueron casando en efecto dominó y la red se colmó de pre-bodas, bodas, post-bodas, "honeymoon`s" a los lugares más exclusivos del mundo y regalos maravillosos de unos invitados igual de maravillosos. ¿Qué venía después de todo el despliegue bodil? EMBARAZOS con el mismo efecto dominó que los bodorrios. Embarazos semana a semana, con el chorro de pis para el test incluído, y a medida que la tripa crecía se iba vislumbrando lo que está pasando ahora mismo.

Vuelta al cole

Esta semana empieza el cole y con él los madrugones, las rutinas, las mochilas, los llantos y las alegrías, los reencuentros, los cambios...

Si algo me gusta del hemisferio norte, es la posibilidad de tener en un mismo año dos comienzos diferentes. Leí en Instagram que Septiembre es el Lunes del año y no puede ser más cierto. Por lo que también es el mes de las quejas.

Harta estoy de escuchar a madres y padres quejándose de lo que cuestan los libros, de lo que cuestan los uniformes quién los tiene, de lo que se tienen que gastar en ropa y zapatillas, de la liberación de dejarlos el comedor, de las maratones de tareas y de las angustiosas extraescolares que hacen que la semana sea un constante ir y venir de inglés, natación, fútbol, ballet, y un largo etc.

Sobre la política española

Como podemos creer en nuestra clase política, cuando no son capaces de ponerse de acuerdo entre ellos por el famoso y ya cansino "bien de España".

El bien de España lo estamos haciendo los habitantes de este maravilloso país, que a pesar de la situación en la que muchos estamos metidos, a pesar de haber aguantado muchas mentiras desde hace décadas, a pesar de estar trabajando cada vez por menos, pagando las deudas de los bancos y sobre todo pagándoles a ustedes y todas las elecciones que les de la gana hacer, seguimos luchando.

NO CREO EN DIOS

Me dí cuenta que soy atea allá por el año 88, tenía 7 años, mi abuela se fue a operar de la vesícula y no volvió más. No sé todo lo que le pedí a dios que la ayudara, que la salvara y que volviera a casa, pero no volvió y yo caí en que algo no iba bien con ese tema.

Me pueden decir que es muy infantil, muy precipitado, incluso que dios tenía mejores planes para mi abuela, pero no cuela. A mí me dejó sin abuela, a mi padre sin su madre con apenas 32 años y lo peor, a mi bisabuela con el dolor incurable de perder una hija así, sin anestesia.

INFLUENCER: el negocio que no acaba con la publicación de la foto

Supongamos que soy influencer (ejem, tienen que suponer mucho...) lo que significa básicamente que influyo a un grupo de personas. ¿De que manera las influyo? Podría influir en una manera de pensar, en una forma de actuar, pero no, yo influyo en los trapitos que se tienen que poner. Así que como soy verdaderamente muy influyente y las marcas se han dado cuenta de eso, se ponen en contacto conmigo y me ofrecen una colaboración. Como me parece un producto que va totalmente con mi "forma de ver la moda" y que yo llevaría (si no fuera porque ya me acostumbré sólo a llevar por lo que me pagan) acepto la colaboración y cobro un dinero por hacer unas fotos para IG de un producto que me han dado ellos. En el pie de foto obviamente describo las maravillas de la prenda, accesorio o "loquesea" que me han dado para enseñar y lo recomiendo sin antes mencionar la marca para que mis seguidoras lo compren y puedan llegar a ser tan felices como lo soy yo enseñándolo (aunque será difícil ya que yo no he gastado ni un duro y además me han pagado por ello) Fin.